¿Estarás lavándote la cara a diario incorrectamente?

Si continúas lavándote la cara incorrectamente, la piel puede dañarse y envejecer, causando piel áspera, sequedad, manchas y opacidad.

A continuación, hay algunas de las formas incorrectas de lavarse la cara. Repasemos los métodos diarios de lavado de cara que hemos utilizado hasta ahora.


■No lavarse la cara a la temperatura adecuada

La mejor forma de lavarse la cara es con agua tibia.

La temperatura específica es 32 °C para piel normal, alrededor de 28 °C, que es aproximadamente 5 °C más baja para piel seca, 34-35 °C, que es un poco más alta para piel grasa, y 28-32 °C para personas con piel mixta.

Algunas personas se lavan la cara con agua fría con la esperanza de que esto apriete los poros, pero esto es contraproducente para crear una piel hermosa. El exceso de sebo y las células muertas de la piel son difíciles de eliminar con agua fría, y el agua fría repentinamente irrita y daña la piel.

Pero si piensas que las manchas de sebo se pueden eliminar bien con agua caliente, esto también es contraproducente. El agua caliente eliminará el sebo y el colágeno necesario para la piel, lo que provocará sequedad y otras pieles ásperas.

 

■ Usar la ducha cuando mientras te lavas la cara

Las personas que se lavan la cara al bañarse suelen utilizar la ducha. Así no hace falta coger agua caliente a mano, la espuma se hace mejor, y terminas más rápido.

Sin embargo, la presión del agua en la ducha irrita la piel y provoca envejecimiento, como flacidez.

 

■ Pasar mucho tiempo lavándose la cara

Dicen que un minuto es la pauta para lavarse la cara. Dejar el limpiador facial sobre la piel durante mucho tiempo es malo para la piel.

 

■Lavándose la cara muchas veces al día

Lo ideal es lavarse la cara dos veces al día, por la mañana y por la noche. Las personas con piel grasa y problemas de poros querrán lavarse la cara muchas veces al día.

Sin embargo, el lavado excesivo puede causar problemas en la piel como piel seca y secreción excesiva de sebo.